La  Psicología como ciencia de la mente, de la conciencia y del comportamiento es una de las principales disciplinas que se ocupa del envejecimiento.

El papel que puede ejercer el Psicólogo en el ámbito gerontológico es muy amplio. De todas estas funciones, en el contexto de la promoción del envejecimiento activo se destaca el papel del del psicólogo como difusor de salud, educador y dinamizador social.

Nuestra atención se desarrolla a través del método científico y técnicas psicoterapéuticas y terapéuticas reconocidas, orientadas a la prevención de la salud y a la intervención profesional especializada.

Desde los numerosos recursos y servicios que te proponemos, tanto a nivel individual como familiar, podrás mejorar y/o cuidarte desde las primeras situaciones que lo requieran, accediendo a diagnósticos, tratamientos, consultas, pruebas técnicas y rehabilitación con toda comodidad una vez que se haya elaborado un plan de trabajo a su medida.

Propuesta de recursos y servicios para mejorar la calidad de vida de las personas, está directamente relacionada con aspectos  físicos, salud cognitiva, emocional, nutricionales y alimentarios y sociales.

  • Conocer las necesidades cognitivas, conductuales y emocionales del paciente.
  • Intervenir en la mejora de las habilidades cognitivas, de compensación y restauración.
  •  Favorecer la independencia funcional, participación activa y calidad de vida.
  • Tratamiento de síntomas y trastornos de conducta.
  • Abordajes terapéuticos para el cuidado de la demencia. Alianza Equipo-Paciente-Familia.

Nuestros profesionales también podrán ayudarte en el asesoramiento e intervención Global y Multidisciplinar abordando las situaciones en todas las variables que le afectan, mantienen o cronifican, relacionados con aspectos cognitivos, de prevención de la dependencia, rehabilitación funcional, cognitiva y social, asi como el apoyo psicoterapéutico de la persona mayor.

  • Para un mejor control de los síntomas de tu enfermedad.
  • Incorporar hábitos de vida saludables en torno a la afectividad y sentimientos que te genera tu enfermedad, autonomía, aislamiento…
  • Mejora de la comunicación con los profesionales sanitarios.
  • Mejor cumplimiento de los tratamientos y consejos de los profesionales que atienden tu salud.
  • Reducir las visitas a urgencias.
  • Disminuir el número y duración de las estancias hospitalarias.

¡ Piensa en nosotros para la atención de tus seres queridos y cuando hagas tus planes de fututo!

Contribuciones desde la Psicología para envejecer.